sábado, 22 de octubre de 2011

Segunda jornada en Viena

Empezó a primera hora de la mañana con la visita al Colegio Federal de la Moda, colegio profesional en el que se estudian todas aquellas materias necesarias para incorporarse al mundo laboral de la moda. Entre ellas se encuentra el encaje y el bordado tradicional. Quedé maravillada con las piezas de encaje de aguja en diseño moderno. Preciosas, de verdad, y una perfeccion...Por ello me estoy replanteando mi "aversión" a la aguja y creo que voy a intentarlo.
La segunda visita fué a la firma Backhausen, empresa dedicada al arte textil desde mediados del siglo XIX y que ha surtido con sus tapicerías a muchos edificios emblemáticos de Viena como la Ópera o el Parlamento. En el sótano del edificio se encuentra su Museo Textil, con un importante archivo de diseños históricos y contemporáneos (posee más de 3000 diseños originales), de diseñadores de Art Nouveau como Dagobert Peche y el arquitecto y diseñador Josef Hoffmann (foto, la de la izquierda es el diseño).

Y a las 11,30 partimos en dirección al Monasterio de Klosterneuburg en el que visitamos la Cámara del Tesoro, que abrió por primera vez al público el mes de mayo pasado. Una colección de vestiduras y objetos litúrgicos (casullas, cálices, custodias...) impresionantes. Pero me encantó el Nacimiento en coral y me impresionó la imágen de marfil, tallado en una pieza, que representa los horrores del infierno.

Y no, no vimos encajes y tampoco visitamos sus afamadas bodegas. Una verdadera pena.

1 comentario:

  1. Muy interesante tu viaje, tiene que ser preciosa....y menudos encajes.....una verdadera maravilla.....pasatelo muy muy bien...bssss.

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